Acorde al Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (2012) en México, el color de la piel y la apariencia física pueden disminuir la posibilidad de conseguir un trabajo bien pagado. Hamermesh y Biddle (1994) encontraron que la gente poco atractiva gana menos que el promedio de la gente bien parecida. El castigo está entre el 5% y 10%. El empleo proporciona a las persona satisfacción económica y personal, por lo que es importante que todos tengan iguales oportunidades laborales. El objetivo de este trabajo, fue desarrollar un cuestionario para investigar si los empleadores buscar una imagen específica al seleccionar trabajadores y si tienen preferencias de imagen profesional ya en el lugar de trabajo. La investigación se enfoca en mandos medios y altos, en estas posiciones hay más cercanía entre empleador y empleado pudiendo resultar relevante la imagen profesional. Se espera encontrar diferencias significativas en las preferencias de imagen de los empleadores. Para elaborar el instrumento se utilizó el modelo de imagen profesional de Meza (2006), se construyó un cuestionario basado en 5 dimensiones: actitud, conducta, discurso, vestimenta (con preguntas abiertas) e identidad profesional  (escala con imágenes). El resultado fue un instrumento con 50 preguntas. Algunas preguntas fueron, ¿Qué crees que es la imagen profesional?, ¿Por qué crees que es importante la imagen profesional? El cuestionario está terminado y será validado tan pronto como sea posible acorde al plan de estudios. En las dimensiones de identidad profesional (que incluye apariencia física) y vestimenta, las personas que se evalúen con baja imagen profesional pueden ser excluidas o discriminadas debido a aspectos que no están relacionados al trabajo.  Los resultados pueden ayudar a los empleados a convertirse en mejores prospectos para un puesto de trabajo.