En nuestro país, la violencia dentro del contexto escolar es un tema de preocupación institucional. Las investigaciones revelan efectos importantes de esta violencia sobre el bienestar, el logro académico, la salud física y mental de los jóvenes estudiantes. Por ello, es necesario investigar las condiciones que favorecen la violencia entre los alumnos, así como, aquellas que la inhiben. La presente investigación se dirige a indagar los diferentes modos de violencia que se posibilitan en el contexto de las relaciones escolares y sus posibles vínculos con el reconocimiento de la autoridad, el cumplimiento de la disciplina y las diversas formas de juegos y competencias en los individuos de la comunidad estudiantil. Se estableció una investigación cualitativa en una secundaria oficial de la ciudad de México. Las técnicas utilizadas fueron la observación etnográfica, la revisión documental y la entrevista en profundidad. La elección de participantes para las entrevistas fue mediante “sujetos clave”: ocho estudiantes, tres docentes y dos autoridades escolares. Se utilizó una guía de observación etnográfica, al igual que guías temáticas para las entrevistas en profundidad. Todos los participantes dieron su consentimiento informado. Los principales análisis fueron temáticos y de significados. A lo largo de la jornada escolar (ingreso a salones, recreo, salida, etc.) fue posible observar gran cantidad de contactos físicos entre los estudiantes, los cuales incluyen empujones, jalones, interacciones o juego rudo (pisotones, golpes, pamba, saludos ritualizados, etc.), que se encuentran significados en el orden del juego pues mantienen ciertos límites y no escalan. Los estudiantes distinguen la violencia escolar (peleas a golpes, violencia abierta) del bullying (insultos o burlas constantes). Los principales motivos por los que hacen bullying son “por diversión, para que los demás se rían”, “para sentirse importante o superior” o “porque alguien te cae mal”. Los temas se refieren al color de piel, peso, talla o defectos físicos, también se burlan y critican de compañeros que “exponen su ignorancia” ante el maestro. Asimismo, es muy común “molestarse en redes” mediante memes, fotos alteradas, packs, mensajes, etc. En general, reconocen a las figuras de autoridad, pero ésta se gana a través del respeto y la congruencia y se puede perder si el profesor no se da a respetar o por tratar al alumno como a un par. Al igual que sucede en la sociedad en general ante las conductas de tipo ilícito o inmorales, los estudiantes evitan, hasta donde se puede, conducirse de manera violenta u obscena ante la mirada de la autoridad, por ello, parte de la violencia escolar puede pasar desapercibida.