Se propone un modelo teórico explicativo de la conducta de dibujar la figura humana en niños de seis a doce años, a partir de las teorías jerárquico factoriales de la inteligencia, de acuerdo con el cual, la habilidad para dibujar la figura humana se debe a la habilidad visoespacial gráfica y a la maduración relacionada con la edad; dicho modelo representa una alternativa al uso prevalente de los dibujos de la figura humana como medida de inteligencia general. Participaron 450 alumnos de seis a doce años de la CDMX, seleccionados por conveniencia. En un estudio descriptivo se aplicaron cinco instrumentos: Test Shipley, combinación A, como medida de inteligencia; Bloques de Shipley como medida de organización perceptual; se adaptó la subescala visomotriz de la Evaluación Multifactorial de la Creatividad como medida de imaginación visual; se aplicó el test Bender-Koppitz como medida de destreza gráfica; la edad se usó como medida de maduración; y se construyó una prueba del dibujo de la figura humana como medida de la variable dependiente. Las pruebas usadas son válidas y confiables. Se encuentra en proceso el análisis final.