Aunque desde el siglo pasado se han logrado muchos avances en torno a la igualdad en todos sentidos, en la última década, en gran parte del continente americano y el resto del planeta, han resultado victoriosos políticos conservadores como Trump o Bolsonaro, ambos caracterizados por tener posturas xenófobas, racistas y sexistas que ha puesto en evidencia tendencias culturales que dan cuenta de posiciones violentas contra colectivos históricamente vulnerados.

En este marco, ha proliferado una postura machista que violenta y desligitima cada acción llevada a cabo con la intención de mejorar las condiciones de las mujeres. Esta postura anti-derechos se siente censurada (principalmente en generaciones jóvenes) y es desde esa sensación que apela la misoginia y la violencia hacia las mujeres en múltiples sentidos.

Conocer las diversas formas de expresión  del machismo en la actualidad, así como explorar los significados y experiencias de hombres jóvenes para analizar lo que hace que estas prácticas puedan ser ejercidas y justificadas, o no identificadas.

Investigación cualitativa de 2 fases por derivación, con propósito descriptivo y comprensivo, de diseño no experimental transversal. El enfoque epistémico-metodológico es a partir de una aproximación feminista y etnográfica digital.

Dentro de la primera fase [Conocimiento] se está realizando una etnografía digital dentro de 3 grupos de Facebook para posteriormente realizar grupos de discusión [Comprensión] con jóvenes habitantes de la Ciudad de México.

Al presente, se ha llevado un primer análisis descriptivo con un solo grupo de la primera fase. Desde esa lectura la narrativa machista analizada puede caputararse en 3 ejes principales : 1) El machismo apela al biologicismo para justificar la desigualdad 2) El machismo violenta desde un Espejismo de la Igualdad y 3) El Feminismo por un lado se piensa como una noción inservible y por otro lado, se percibe como un movimiento peligroso y adoctrinador.